sábado, 27 de septiembre de 2014

Vuelta a la normalidad

Desde que empecé a sentirme mejor, no paro de repetir las palabras...vuelta a la normalidad. Ahora que he vuelto a ella, puedo decir que sí es posible volver a la normalidad después del cáncer de mama. Eso sí... hay matices. 

Pongo un ejemplo. Yo he vuelto al mismo trabajo que realizaba antes de irme, todo esta igual, igualito igualito... a veces, tengo la sensación de que no han pasado 15 meses. A veces, cuando camino por la planta con mis compañeros o charlo con ellos de los problemas habituales a los que nos enfrentamos, no recuerdo que he tenido cáncer, ni que he perdido el pecho, ni creo que ellos lo recuerden... Es agradable esas sensación de normalidad... pero el cáncer se ha convertido en parte de mi vida y la nueva normalidad no vive al margen de él, de hecho si no se hace presente, siento que vivo en una farsa. 

He realizado un trabajo enorme para vivir con la enfermedad y las secuelas de la manera más honrada que he podido, aceptando con resignación todo lo que conlleva. Y creo que he ganado más de lo que he perdido. Estoy segura. Ahora bien, no puedo pretender que mi vuelta a la normalidad sea una negación de lo que me ha ocurrido. No es cuestión de recordar las 24h el tema, pero, hay días en los que sintiéndome bien de estar de nuevo trabajando, cuando de repente me duele el brazo izquierdo o la espalda, o me da un sofoco, o me da una punzada en el pecho de goma... me he entristecido y he dicho, ¿por qué Ana, por qué no puede ser como antes? Y eso, eso es fracasar en mi intento de aceptar lo que me ha ocurrido y vivir feliz después de 15 meses de lucha. 

No voy a permitirlo y vosotros que me leeis me vais a ayudar a no caer en esa tristeza profunda que trae consigo ese pensamiento de ¿por qué tuvo que pasarme a mí?

Ana, recuerda que estas sana... dolorida o no, estás sana. Hace un año aún tenías cáncer... ya muy chiquito, pero lo tenías. Recuerda la suerte que tienes de poder decir que a fecha de hoy, el cáncer no vive en tí. De hecho, el cáncer se llevó una parte del centro donde trabajo y recordar que ya no está esa compañera, me recuerda que ¿de qué coño me puedo sentir triste? 

También me asaltan otros sentimientos algo negativos... Llevo un tiempo descubriéndome pensando de repente en que el cáncer no acabó en mí y que a más edad, más probabilidad. Así que pienso en todas las mujeres que conozco y me muero de pensar que alguna de vosotras algún día tenga que pasar por esto. 

Estoy dedicando mi vida a dar normalidad a esta enfermedad y a sus secuelas y voy yo y pienso que si os ocurre a alguna de vosotras, es lo peor que os puede pasar.  

Ana... vuelve en tí. 

En fin, tal vez esta tristeza o melancolía se deba a que se aproxima el mes de Octubre, el mes dedicado al cáncer de mama y su lucha, precisamente el mes en el que yo gané mi batalla. 

Intentaré convertir este blog durante ese mes en una fiesta del optimismo, pero sobre todo de la normalidad. Sí, de la normalidad de una superviviente de cáncer de mama. 

Por hoy os dejo, intentaré mantener más activo el blog este mes de Octubre... 

Feliz finde.

Os dejo con la canción que soy capaz de oír mil veces por las mañanas en el autobús camino del curro... Para un sábado a las 22.30, la mejor. 


viernes, 19 de septiembre de 2014

¿Qué es optimismo?



Hace unos días, releyendo algunas entradas anteriores, me di cuenta de que he dejado un poco de lado hablar sobre el optimismo en sí mismo. Es verdad que lo que escribo refleja que soy una persona positiva y confío en mostrar que el optimismo habita en mí y ser así me ha ayudado mucho a mantenerme cuerda en los momentos más difíciles que una mujer puede pasar.

En estos días de lluvia y tormenta que nos adelantan la llegada del otoño, podemos caer en la melancolía y la tristeza. “Se acabó lo bueno”, pero yo añado, se acabó lo bueno, pero del verano. Por eso creo que es buen momento para escribir sobre qué es el optimismo y, especialmente, hacer ver que SÍ SE PUEDE aprender a ser optimista.

Pues bien, si alguno busca la definición de optimista en Mr. Google, una de las que más me gusta a mí es la siguiente: 

"Una persona optimista es aquella que siempre encuentra en la desdicha posibilidades para superarse"

Solemos confundir lo que es optimismo con ser un ingenuo. No se trata de ver todo de color de rosas y pensar que todo todito todo te va a ir bien y va a salir estupendamente, que nunca vas a sentir dolor, ni pena y que la desgracia nunca caerá sobre ti. Tampoco es que el optimista se alegre de caer en desgracia. Ni mucho menos. De hecho, si eres de los que piensa que eso es el optimismo, no me extrañaría que no lograses ser feliz nunca.

Yo he aprendido a ser optimista y a confiar en que todo irá bien... con esfuerzo, con sacrificio, con tenacidad, con paciencia, con convicción,... Es un trabajo continuo. En grande... ES UN TRABAJO. Por eso, ser optimista se aprende, igual que uno aprende a montar en bicicleta o a nadar. Uno se cae, pero se levanta y sigue intentándolo. Uno traga agua y pasa un mal rato, pero sigue intentándolo. No tienes que ser el mejor, ni el más rápido, sólo sabes que debes seguir intentándolo.

Yo soy optimista y eso para mí significa que tengo las herramientas emocionales necesarias para enfrentarme ante cualquier dificultad que se me presente en el camino. Vaya que si las tengo!!!! Pero, a ver, me lo he tenido que currar a golpe de quimio y mastectomía. 

¿Qué hace falta para ser optimista?.....  Ganas

Exacto, para ser positivo y luchar por la felicidad, lo primero y principal que hay que tener es ganas. Da igual el millón de veces que te diga alguien que te animes, que todo va a ir bien, que de todo se sale,… si el primero que no tiene ninguna intención de salir de ese pozo de negatividad eres tú.

¿Cómo ser optimista cuando tienes cáncer de mama?.... Ganas y supervivencia.

El cáncer puede llevarte por delante, no le quise dar facilidades. Así que si yo pude, ¿por qué no ibas a poder tú?

Como antes he dicho, para conseguirlo hay que tener ganas, sí, pero luego hay que realizar un trabajo continuo. Sabes tan bien como yo qué es la perseverancia, pues vamos a practicarla no? Ser perseverante te hará no desfallecer al primer contratiempo. Te hará encontrar soluciones cuando parezca imposible encontrarlas. De hecho, te hace ver que en tus manos está encontrar soluciones, porque muchas veces nos cuesta mantener la fe y ser felices porque creemos en que dependemos de la divina providencia y, lo lamento, pero es que no es así.

¿Cómo se logra ser optimista?

Me enseñaron al inicio de la enfermedad a repetir todos los días pensamientos positivos que mantuvieran alta mi motivación en la vida:


Sonríe. Ama. Ríe. Celebra las pequeñas cosas. Sueña sin miedo. La vida es un regalo. Lleva siempre una sonrisa en el bolsillo. Se fuerte. Esperanza. No te rindas nunca.

Y lo hice. Y lo hago todos los días. Todos. Y a veces decía, sonríe??? Cómo? Pero funciona. En serio.
Después han llegado otros ejercicios: todos los días planteo mi vida con el fin de disfrutar cada momento. Todos los días me digo, esto no lo voy a retrasar más. Todos los días abro la agenda y la lleno de cosas por hacer. Todos los días busco tiempo para mí, para hacer algo que me haga sentir bien. Todos los días le digo a mi marido que lo quiero. Todos los días llamo a mi madre… y le digo que la quiero.

Yo ahora me dirijo a ti que no sabes cómo ser positiva con un tumor en tu pecho o recuperándote de uno. Cree en ti, puedes ser feliz. Cree en los demás. Deja que te hagan feliz. Aparta de ti todo lo que te reste energía, porque la necesitas toda para curarte, pero también para vivir feliz. No tienes garantizado nada en esta enfermedad. Sólo piensa que puedes curarte y que de todas las secuelas, saldrás airosa. Habrá muchos días en los que fracasarás porque el camino es duro y una no es de piedra. Ánimo.

Ayer leí una entrevista a Daniel Stix, un chico que nació con cáncer y que como consecuencia no puede caminar, pero 17 años después ha logrado ser todo un campeón deportivo y, lo más importante, se considera más feliz que otros chicos de su edad.  Me quedé con el titular de la entrevista: “La vida no es fácil, pero es bella”. 
 No creo que haya mejor ejemplo de optimismo: ser consciente de las dificultades, no engañarse en una falsa realidad que asegure una vida fácil, tener razones para vivir, vivir alegre y es más, contagiar esa alegría y este optimismo a los que te rodean. 
 Ahora es tu turno. No esperes a tener cáncer de mama para ser feliz. 


miércoles, 17 de septiembre de 2014

Hola amiga...

Hola amiga... Hoy va por tí.


No nos conocemos, aunque sé cómo eres...y sobre todo, sé cómo te sientes. 
Miedo. Esperanza. Incertidumbre. 
Ilusión. Tristeza. Alegría. Satisfacción. 
Coraje.

Un día te sentaste en la consulta de un ginecólogo y te dijo eso de "lo siento, pero tienes cáncer de mama". Un día hace unos meses te sentaste en una sala rodeada de desconocidos y te empezaron a envenenar. Aunque no lo sepas, ese día iniciaste un camino que te llevará a la felicidad.

Yo hace meses inicié este proyecto con el objetivo de sacar de mi cabeza todo aquello que había acumulado durante los meses de quimio y tras la operación. Siempre tuve la esperanza de que mis palabras ayudaran a alguna chica que pasara o hubiera pasado por mi misma experiencia porque a mí otras chicas me ayudaron a pasar por cada una de las fases de la recuperación.

Sé que me lee mucha gente, amig@s que me conocen directamente o amig@s de estos amig@s... y es una sensación fantástica. Sé que en las Islas Canarias tengo un club de fans muy numeroso y por desgracia es en esta tierra, que tanto quiero, donde, tengo dos lectoras que saben lo que es el cáncer de mama. 

Hoy he podido contactar con una de ellas que me ha conmovido especialmente, porque sé que es joven y madre de unos niños preciosos... que se sentía en la flor de la vida y el puto cáncer se ha cruzado en su camino. 

Hola amiga.


Sé que eres fuerte. Sé que te está yendo bien esa quimio y ese tumor ya no es tan valiente. Tiene las horas contadas. No lo dudes, vas a poder con él. 

Aún te queda un camino largo, pero como bien dices, es cuestión de paciencia. Yo además te quiero decir que no es sólo paciencia lo que te hace falta, que es mucha. Te hará falta mucha fe en tí, en que eres capaz de superar el dolor, la angustia y el miedo. No sé si te servirá esto que te voy a decir, pero yo tengo mucha fe en tí porque sé que si yo pude, tú de sobra podrás y un día no muy lejano... gritarás eso de  SI SE PUEDE.

Recuerda en tus momentos más bajos que no estás sola... y que en la distancia tienes una amiga de tetas de goma que se siente muy feliz por poder darte la mano, aunque sea de forma vitual. 

Ojalá nadie más tuviera que pasar por un cáncer de mama, pero al menos tienes el consuelo de saber que hay más como tú y su vida tras el cáncer está llena de eso, de vida. Y eso es el regalo más grande que te pueden hacer.

Amiga Virginia... eres una campeona, no lo olvides.

Mi besín más gordo hoy es para tí.

Os dejo con una de las mejores canciones que nadie ha escrito... y lo sabéis!!!




miércoles, 10 de septiembre de 2014

Belleza imperfecta

Ya lo he dicho muchas veces, pero me gusta repetirme: este humilde blog surgió por la necesidad de expresarme en cualquier momento sobre aquello que me interesa o afecta como luchadora y superviviente del cáncer de mama, siempre con el objetivo claro de servir de ayuda a cualquier otra mujer que se vea afectada por esta enfermedad. 

Hoy quiero centrar esta entrada en algo que planea en la cabeza de toda mujer mastectomizada... la belleza.

¿Dónde vive la belleza femenina?

Hace unos meses Bimba Bosé nos sorprendió con la noticia de que había sido sometida a una mastectomía al haberse detectado un cáncer de mama en fase inicial y que iba a iniciar un tratamiento de quimioterapia. La verdad que nunca he tenido afinidad por esta chica, pero conocer esa noticia me conmovió. Por muy distintas que seamos las dos, sé lo que sintió al conocer la noticia de su cáncer, de que iba a ser sometida a una operación mutilante, de que iba a ser torturada con la quimio,... pero me conmovió especialmente la noticia por un motivo: su profesión de modelo. No pensé en que no volvería a trabajar de modelo, porque intuyendo como es ella de transgresora, no creo que un pecho menos la condicionara, pero sí que pensé en que su cuerpo de modelo era perfecto y ahora ya no lo sería (error), me entristecí porque pensé que para ella sería más duro que para otra mujer porque no sólo le afecta en su día a día como mujer, sino que también en su vida laboral... Yo que he vuelto a trabajar en estos días, siento la liberación de volver a lo que hacía antes "sin que algo haya cambiado". Me entristecía pensar que no podría tener su parcela de "acá el cáncer no ha metido la mano". Hace unos días nos dio a todos una lección. Al igual que muchas mujeres que sufren mutilaciones por el cáncer de mama, ella lució orgullosa su mastectomía. Una foto preciosa que os dejo acá para que la veáis. 


Yo vi la foto y además de echar alguna lágrima, no vi en ella una enferma de cáncer, vi a una modelo posando. Para mí esa es la diferencia con otras fotos. Y pensé...el cáncer no la ha cambiado. Y entonces me di cuenta de que eso es ganar la batalla al cáncer. 

Creo que es importante que le dedique algún tiempo a reflexionar sobre esto porque soy mujer y porque gracias al cáncer de mama mi cuerpo ha sufrido variaciones que impactarían a cualquiera y que hacen que tenga que revisar mi concepto de belleza. 

En la condición femenina va, por regla general, las continuas dudas sobre nuestro aspecto físico y nuestra insatisfacción constante. Si eres mujer, y tu autoestima sube y baja como lo hace la Bolsa, piensa en un solo momento en cómo te tomarías verte sin pecho, con cicatrices o con un pecho que no es el tuyo y que no reconoces ni sientes al tacto.¡¡¡Pues no, te has equivocado!!! No es el fin de tu vida como mujer... al igual que Bimba Bosé, puedes acabar siendo tú misma. Y lo mejor, hasta puede que te gustes más... 

Esto que voy a escribir ahora va para la que vaya a pasar por la quimio-tortura o la esté pasando o la que esté mastectomizada. Sé que calva no te gustas, que estás blanca, demacrada, hinchada, has engordado, sin cejas (que es hasta más traumático que perder el pelo),... pero eso pasará. Y volverás a verte sana, pero quiero decirte que creo que debes dedicar un tiempo a mirarte al espejo, mírate a los ojos. Esos ojos llorosos que ves... eso es lo más bonito que tienes, sana o no. Palabrita.

Ahí está la belleza de una mujer que lucha y sobrevive a un cáncer de mama, bueno, de cualquiera que lucha y sobrevive.

Ahora que tengo un pelo alocado intento recordar cómo me veía calva... y no lo consigo, en serio. Recuerdo mi mirada llorosa y me decía a mí misma en el espejo, Ana, todo pasará. Esos ojos sí que no los olvido, hasta sin pestañitas y sin expresión alguna porque mis cejas clareaban. Ahora tengo una mirada distinta, la alegría asoma sin hacer esfuerzos, pero en ellos sigo viendo a esa Ana que decía, todo pasará. Ellos tuvieron más fe que yo y me dieron fuerzas.

Como es cuestión de sincerarse, la verdad es que nunca fui guapa, ni me sentí guapa..., pero ahora es distinto, ahora me siento muy bien en mi piel, aunque me sigan sobrando kilos y mi nariz siga siendo grande. Ahora tengo las herramientas necesarias para no dejarme vencer por complejos e inseguridades, ahora puedo sentirme no sólo bien por dentro, sino también por fuera. No me importan ya mis manchas en la piel, ni mi baja estatura, ni mi pelo despeinado, ni mis ojeras,... ni mi pérdida de mamas. He descubierto que todo eso no soy yo. Ni tú. Ni ninguna mujer. 

Conozco a mujeres muy guapas, tremendamente guapas... pero en su mirada hay amargura, hay soledad, hay miedo, hay inseguridad, envidia, decepción,... Tú, calva y sin cejas ni pestañas, hinchada como una pelota, ojerosa, sin pecho... pero llena de esperanza y de vida, les das mil vueltas porque lo que hoy en día se llama belleza, no es belleza, es perfección. Y ¿es que acaso lo imperfecto no es bello?


Ahora te digo, ese coraje que tienes para luchar contra el cáncer, tendrás que tenerlo para mirarte a los ojos y descubrir lo guapa que eres. Las que estáis sanas y sois guapas, haced lo mismo. Tened coraje para dejar de asustaros por la imagen en el espejo... un día puedes estar en este lado y te darás cuenta de que eres tonta por pensar que ese michelín no está donde debería estar.

Yo... a pesar de mis palabras hago lo que puedo... 



Me despido por hoy. Un besín.



Feel



domingo, 7 de septiembre de 2014

Chaparrones de Septiembre

Septiembre

Al fin saco tiempo para sentarme y escribir en el blog. 

Precisamente hoy, domingo y oliendo a tierra mojada. Han caído los primeros chaparrones de Septiembre y hasta se han escuchado truenos a lo lejos... Señal de que el otoño se aproxima. 

Me gusta el otoño muchísmo. El otoño en Sevilla, claro. Cuando ya no hace tanto calor, pero aún no tiene uno cuerpo ni blancura de invierno. Este otoño que asoma no sólo trae tormentas de esas de truenos y rayos, sino también una de ideas y planes. Tengo tantas ganas de hacer todo que no creo que pueda estar a pleno rendimiento en todas, así que intento priorizar. 

MI LISTA DE PLANES PARA EL PRÓXIMO OTOÑO
  1. Retomar mi práctica de yoga con mi maravillosa monitora y amiga María del Mar. Practicar yoga y meditar se ha convertido en una herramienta fundamental en mi recuperación física. No, no hago el pino puente ni soy flexible, pero mi espalda, mis brazos inertes por la mastectomía y mi nueva piel agradecen cada una de las asanas. Me he abandonado estas últimas semanas de Agosto y la vuelta al curro me ha hecho ver que no puedo dejar de hacer ejercicio. 
  2. Volver a correr, no sólo para estar bien físicamente. Hay que entrenar para preparar la carrera de la mujer, aunque luego se haga andando...jejeje. Hay que volver a correr porque corriendo recuerdo que  #sísepuede 
  3. Participar en la Carrera de la Mujer con todo mi club de fans. 5 de Octubre. Sevilla. 
  4. Volver a coger boli y lápiz para retomar los estudios. Es tiempo de seguir formándose para nuevos retos. Espero no decaer.
  5. Buscar el regalo perfecto para el cumple de mi herma y de mi padre. 11 y 12 de Octubre. Este año ha sido un año duro para mi familia. Yo estaba en plena faena y no me daba cuenta. Ahora que me encuentro "redbullizada", sé que ellos también merecen su recompensa. Siempre lamentaré que hayan tenido que sufrir esto. Especialmente mis padres. Ya merecen tener una vida tranquila.
  6. Mi reconstrucción CAP. A mí me da pereza, porque me encuentro muy bien y me gusta mi nuevo pecho, sobre todo ahora que las cicatrices están muy muy muy bien!!! Ahora pensar en volver a pasar por un quirófano o tener que pasar por la experiencia de tatuarme me da eso, pereza. A mi edad, a tatuarme. Quién me lo iba a decir a mí. Eso será otro post. Tengo que reconocer que me da algo de miedo también. Se piensa eso de "que me quede como estoy", pero otras mujeres que se han reconstruido el CAP me han dicho que merece mucho la pena y mi cirujano plástico tiene unas manos estupendas. Así que, este otoño estrenaré CAP. 
  7. Organizar y celebrar mi 1er CUMPLEVIDA. Así lo he bautizado. El 24 de Octubre me regalaron una nueva vida, así que el 22 de Junio celebraré siempre mi cumpleaños, pero el 24, ese 24 será mi cumplevidas... Chica, hay que celebrarlo todo, que putas ya las has pasado!!!! Grábate esto en la cabeza. 
  8. Buscar un regalo original para el cumple de mi león peleón. Mi Anto. 28 de Noviembre. 
  9. Organizar lo que cariñosamente llamo mis manualidades. Por lo visto, están gustando. Así que quiero dedicarle más tiempo y aprender a hacer cositas nuevas. Durante la convalecencia te recomiendo que te entretengas en cosas que no te hagan perder mucha energía y que sean creativas. Yo intenté de todo, pero al final, algo que se me da relativamente bien es hacer pulseras y collares de trapillo. Aprendí gracias a una chica jovencita Maitane Palacios y su Maijaus Bisutería. Hace cosas estupendas y me hizo sentir muy bien contactar con ella y su amabilidad durante mi quimio. Rodearse de gente de gran corazón es muy recomendable, sanota o calva.
  10. Practicar mi morro-pose para las fotografías en Londres. Jeje!! Oncoamiga, planea todo lo que quieras. No tengas miedo a soñar. Siempre quise ir a Londres y nunca fui. Así que no se me ocurre mejor manera de agradecer esta nueva oportunidad que se me ha brindado que haciendo aquello que siempre desee, pero nunca hice. Suso, Aurora, mi Anto y yo. Londres. Nada puede hacerme más ilusión. 
Listas. Siempre haciendo listas. 

No siempre se hace todo, pero me pone de buen humor hacer mis listas. Te lo recomiendo, especialmente si estás en tus horas bajas. 


Otoño es una buena época para hacer listas de planes. Para las luchadoras de cáncer también, aunque no lo creas. Una de las cosas buenas que tiene esta época para los pacientes de cáncer, para nosotras es que se inician campañas de concienciación y hay miles de actividades en las que puedes participar, de una u otra manera. Este mes de Septiembre es el mes dedicado a la lucha contra el cáncer de ovario, cruel como todos, y difícil de detectar a tiempo. Puto cáncer. Así que es una buena época para las luchadoras de cáncer porque la información es poder. Y yo como paciente de cáncer de mama, sé que el de ovario está muy ligado, así que sé que ahora más que nunca debo invertir parte de mi tiempo en llevar una vida sana y no olvidar mis revisiones ginecológicas. El mes de Octubre es nuestro mes... mes de saber que no estamos solas, que se nos quiere, que se investiga, que se invierte (ojalá más) en conocer esta enfermedad más aún de lo que ya se la conoce, que el rosa es un color lleno de esperanza, que hay mujeres que te apoyan INCONDICIONALMENTE, ... Planea en estos meses celebrar que, aunque la vida te ha dado un golpe muy fuerte, difícil de superar, somos muchas mujeres las que celebramos que estamos limpias y llenas de vida y que tú eres una de nosotras,...

Ilusiónate este otoño porque te esperan cosas excepcionales a la vuelta de la esquina. Te lo mereces.